Madrid sigue posicionada como una de las ciudades europeas con mayor flujo de turistas nacionales e internacionales. Hasta el cierre de mayo del presente año, la capital había recibido casi 3.000.000 de visitantes. Las actividades de ocio, el movimiento cultural y la gastronomía figuran entre los principales atractivos.
Sobre la oferta culinaria, para muchos viajeros, visitar una auténtica taberna andaluza constituye uno de los encuentros más cercanos con la cultura española. Degustar raciones de las tradicionales tapas, saborear un auténtico vino y elegir uno de los platos de la extensa gastronomía local es una vivencia única.
La parada obligatoria en una taberna andaluza auténtica
En la capital española, los lugares que ofrecen la posibilidad de vivir esa experiencia son los Restaurantes Cazorla. Son un “pedazo de Andalucía en Madrid”. Con hasta 9 ubicaciones repartidas por la ciudad, el local situado en Juan de Mena 12 son referentes en la cocina andaluza.
Para compartir, los comensales pueden elegir entre raciones de anchoas, atún o jamón ibérico de bellota. Gambas, quesos, almejas, mejillones y pulpo son otras de las opciones. Las ensaladas clásicas de la cocina andaluza también figuran en el menú como la ventresca con tomate aliñado o el bonito en escabeche y tomate, con tomates pelados a cuchillo cada mañana.
Como platos principales, la comida andaluza de estos restaurantes destaca por su variedad de carnes y pescados. Merluza de la casa, rape con almejas, atún rojo de Almadraba, solomillo de ternera o chuletillas de cordero están entre las alternativas más fuertes. Su arroz a la marinera o con bogavante son platos muy celebrados por sus clientes, al igual que su carta de vinos y sus postres.
Una ubicación óptima
Los principales portales turísticos definen a los restaurantes Cazorla como una parada obligatoria que hace todo visitante de la ciudad, también por su ubicación privilegiada. Hay un restaurante Cazorla cerca de cada punto de interés. El de la calle Juan de Mena, 12, se sitúa junto a destinos muy cotizados como el Museo del Prado y el Parque El Retiro. Ambos lugares reciben al año cientos de miles de turistas desde todas partes del mundo.
Pero también hay un Cazorla cerca de la plaza de toros de las Ventas (Calle Montesa, 30), cerca del estadio Santiago Bernabéu (Calle San Germán, 8), cerca del recinto ferial Ifema (Calle Machupichu, 16). Y para experiencias más contemplativas, están el Museo Nacional de Ciencias Naturales y el Sorolla, a los cuales se puede llegar en minutos desde varios restaurantes (Calle Castelló, 99 o Calle Rodríguez Marín, 80).
Al estar en medio de las principales rutas turísticas, estos restaurantes son ideales para hacer una pausa gastronómica y almorzar. Incluso, se puede tapear acompañando la ración con un buen vino y después continuar el recorrido por la ciudad. Los representantes de la cadena aseveran que han diseñado ambientes acogedores y afables que reflejan el modo de vida madrileño.
En definitiva, se puede encontrar un excelente ambiente con una propuesta gastronómica de calidad en cualquiera de sus 9 ubicaciones Madrid. La cantidad de clientes habituales hace que siempre esté lleno, por lo que se recomienda reservar con antelación.
