Las lluvias, aunque vienen muy bien después de meses de sequía, también traen consigo problemas comunes en los hogares, principalmente en forma de humedades que pueden deteriorar la estructura y estética de las viviendas. Para abordar estos problemas, Grupo Hydrotec, expertos en soluciones de capilaridad, filtración y condensación, recalcan la importancia de una atención a los primeros signos de humedad en las paredes.
Las humedades suelen clasificarse en tres tipos principales, cada una con medidas específicas para prevenir daños graves:
Humedades por Filtración: Este tipo se origina cuando el agua penetra en las paredes que están por debajo del nivel de suelo, estando la pared semi o completamente soterrada, a través de pequeñas fisuras o áreas deterioradas. Grupo Hydrotec sugiere realizar inspecciones periódicas para identificar y reparar estos problemas a tiempo, evitando que las filtraciones se conviertan en problemas estructurales mayores. Renovar sellados, reemplazar piezas dañadas y aplicar productos de alta calidad ayudará a mantener la impermeabilización efectiva.
Humedades por Condensación: Estas humedades pueden generarse por falta de ventilación o un mal aislamiento térmico. Es recomendable combinar un aislamiento adecuado y un sistema de ventilación que mantengan el aire en circulación, especialmente en espacios interiores.
Humedades por capilaridad: Se producen humedades en las paredes situadas en la planta baja, ascendiendo por remontada capilar desde la cimentación del edificio. En época de lluvias intensas, sube el nivel freático del agua, inundando los cimientos y realizando que las paredes absorban el agua como si se tratasen de esponjas.
Adoptar estas medidas preventivas ayuda a prolongar la vida útil de las estructuras, mantener los espacios libres de humedades y garantizar que los hogares se mantengan en buen estado, sin importar la intensidad de las lluvias.
