El 90 % de las personas tienen al menos una infección por hongos durante algún momento de su vida.
Este tipo de infecciones pueden darse en cualquier parte del cuerpo, aunque son muy frecuentes en la zona íntima de las mujeres, en las uñas de manos y pies, y en los pies.
Los hongos de las uñas se conocen como onicomicosis, y son una infección que puede afectar a las uñas de los pies y las manos. Pueden provocar dolor, picor y decoloración de las uñas. Reconocer los primeros signos de las micosis del dedo gordo del pie o de la mano es fundamental para garantizar la salud general de la zona.
Reconocer hongos en las uñas de los pies o de las manos
Las uñas de los pies se infectan hasta 10 veces más que las de las manos. Aproximadamente, entre el 60 y el 80 % de los casos son causados por los llamados dermatofitos ungueales, microhongos que provocan infecciones micóticas en la piel y las uñas.
Los síntomas de los hongos en las uñas de los pies incluyen decoloración, engrosamiento, deformidad de la uña y separación de la uña del lecho ungueal. Durante el proceso se pueden llegar a ver uñas amarillentas, o incluso uñas negras, causadas por residuos que se acumulan y oscurecen el área afectada.
Tratamiento de hongos en las uñas
El tratamiento para los hongos en las uñas de los pies depende de la gravedad de la infección. Una valoración inicial con un médico permite adoptar el tratamiento farmacológico adecuado, ya sea con antimicóticos orales, antimicóticos tópicos o tratamientos con láser en determinados casos.
Además, las infecciones con hongos suelen ser recurrentes, lo que significa que en un año pueden darse varias, si no se tratan de forma adecuada.
Para evitar las recurrencias, deben tomarse precauciones y medidas preventivas.
En casa, después de la piscina o del gimnasio, es muy necesario utilizar un gel limpiador suave que contenga activos que eviten las infecciones. Par ello, los limpiadores de farmacia que contienen activos específicos son muy interesantes. Laboratoires Bailleul ha lanzado un nuevo limpiador que es único evitando estas infecciones: Mycogel.
Además, a diario es importante mantener las uñas limpias y secas, lavando previamente con un gel como Mycogel y con un cepillo específico para uñas, que debe limpiarse después de su uso. También hay que cortar las uñas con regularidad para evitar que se encarnen y usar zapatos transpirables y de talla adecuada, junto a calcetines de algodón. Se debe evitar caminar descalzo en lugares públicos y evitar compartir artículos personales, como cortauñas o zapatos. Además, es muy recomendable masajear las cutículas regularmente con aceite para cutículas para hidratar y suavizar la piel de la zona.
Siguiendo este tipo de recomendaciones se pueden evitar todo tipo de infecciones fúngicas
