Saborear una rebanada de pan con mermelada de oliva virgen extra, aderezar una carne con el aliño de sidra Señor Ovies o culminar un plato con la sal de sidra ya es posible gracias a la creación de los nuevos productos de marca propia de Érase un Gourmet.
Desde Asturias, este disfrute y miles de combinaciones más pueden llegar a las mesas de España y de toda Europa gracias a esta tienda única en su estilo. Érase un Gourmet, con la chef Lara Roguer, presenta 6 nuevos productos propios para quienes disfrutan de “mimar los sentidos” con cada bocado, tal como lo expresa su creadora y gerente, Sandra Ovies.
Nuevos productos de marca propia
Más allá de ofrecer a sus clientes la más apetecible oferta de alimentos de alta gama, la empresa gastronómica ha lanzado al mercado su línea de productos propios “Érase un gourmet” que nacen de la combinación del aceite de Jaén de Olivar de Castro y la sidra asturiana. Estos productos son el resultado de unir aquello diferente con la exquisitez culinaria de una profesional que fue nombrada Chef del año en 2020, Lara Roguez.
Los seis productos culinarios creados están elaborados por Olivar de Castro a base de sidra, aceite de oliva, lavanda y fresas y cinco de ellos no existen actualmente en el mercado. Estos son la mermelada de oliva virgen extra, un ingrediente muy versátil con múltiples usos o la emulsión de aceite de oliva virgen extra, perfecta para diferentes funciones como untar el pan, hornear o como acompañamiento de quesos o patés. Además, se ha elaborado una sal de aceite, que ofrece todos los beneficios del aceite de oliva, así como un vinagre de sidra con fresas y lavanda, que aporta un aroma puro que despierta los sentidos con los diferentes matices.
Pero los productos estrellas entre de los artículos propios de Érase una Gourmet son aquellos creados y elaborados a base de sidra y que no existían en el mercado hasta ahora. El aliño de sidra Señor Ovies, que sirve para cocinar tanto carnes como pescados de una forma saludable sin utilizar ningún tipo de grasa y la nueva sal de sidra, que aporta el sabor de la tradicional sidra asturiana a los platos y enriquece los diferentes platos.
Además, cabe destacar que un porcentaje de las ventas de los productos se destina a la Fundación Ramón Grosso, una iniciativa sin fines de lucro que impulsa acciones de mejoras educativas y sociales en Chad, en África Central.
Acerca de Érase un Gourmet
Érase un Gourmet es una tienda centrada en ofrecer los productos más originales, selectos y de excelente calidad. Disponen de un amplio catálogo de productos en el que se encuentran también productos de marca propia con el objetivo de garantizar una plena satisfacción en el cliente con cada uno de ellos. En el sabor y la presentación se refleja el amor con que el equipo trabaja para seleccionar la mejor experiencia en la mesa, un sueño gastronómico hecho realidad. Tal como expone su fundadora, Sandra Ovies, «los productos gourmet no son necesariamente los más caros y exclusivos, sino aquellos que provienen de una cuidada recolección o elaboración, independientemente de su precio» y en Érase un Gourmet se ofrecen posibilidades para satisfacer todas las necesidades porque los pequeños detalles hacen que lo mejor sea sublime.