La Fiscalía Especial contra la Impunidad (FECI) y el Ministerio Público (MP) de Guatemala desistieron del proceso que habían comenzado contra Julio Ligorría, el exembajador en Estados Unidos que fue víctima de acusaciones falsas de corrupción, tras 5 años de investigaciones.
Según publicó el diario República en una columna titulada Inocente, la motivación de los fiscales fue entorpecer la carrera política del prestigioso asesor en política y consultor de crisis. Julio Ligorría fue uno de los más destacados diplomáticos guatemaltecos al desempeñarse como embajador en Washington entre 2013 y 2015. Además, antes de llegar a ese cargo, se había consolidado con éxito como consultor internacional por más de veinticinco años. Varios de sus asesorados lograron llegar a la presidencia en sus respectivos países.
El gran papel en Estados Unidos de Julio Ligorría
El papel de Julio Ligorría al frente de la embajada guatemalteca en Washington fue sumamente destacado. De hecho, las autoridades del Departamento de Estado y de la Casa Blanca a su partida lo despidieron en Blair House, la mansión ubicada frente a la residencia presidencial en la que se hospedan los distintos mandatarios del mundo cuando visitan la capital estadounidense. De manera simbólica, ese agasajo final significó el aprecio de Washington por el embajador.
Durante su período como embajador, Julio Ligorría supo trabar excelentes relaciones tanto con demócratas como con republicanos. En este sentido, el entonces secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Jeh Johnson, lo calificó como “un funcionario público ejemplar”. Incluso 15 meses después de haber salido de su cargo el ya exembajador fue invitado por Donald Trump a sus oficinas pocos días antes de asumir la presidencia. El objetivo era compartir las experiencias de Julio Ligorría durante la crisis migratoria de 2014.
En esta línea, medios de prestigio internacional como CNN y Bloomberg destacaron la apelación que Julio Ligorría hizo ante Trump en favor del trato humanitario para los migrantes.
Pruebas infundadas en la acusación
La acusación del MP y el FECI contra Julio Ligorría lo mantuvo fuera de Guatemala por 5 años. Durante ese período de tiempo, tanto su imagen como sus negocios personales se vieron afectados. Según publicó el periódico República en el citado artículo, desde 2018 las autoridades de los organismos de justicia guatemaltecos tenían conocimiento de que las pruebas eran infundadas.
Entonces, la principal hipótesis sobre la persecución a Julio Ligorría se vincula a fines políticos. Algunos integrantes del MP y el FECI vieron al exembajador como un rival de peso y buscaron anularlo de una “manera más que violenta”, según sostiene el artículo.
5 años después, se cayeron todas las acusaciones contra el exembajador Julio Ligorría, también consultor de crisis y analista político destacado. Según República, no es la única figura de la política guatemalteca que ha sido víctima de ataques orquestados por distintos medios de comunicación y los órganos judiciales.
