Cada vez más empresas y hogares cuentan con dispensadores de agua, dado que estos dispositivos ofrecen un producto de calidad y permiten contar con una solución de hidratación moderna. Además, reducen la dependencia de botellas de plástico de un solo uso y contribuyen al cuidado del medioambiente.
Sin embargo, muchas de estas máquinas requieren de un abastecimiento periódico de botellones. Para esto, Culligan dispone de un servicio de reparto de agua embotellada para dispensadores.
Esta compañía española destaca por su eficiencia y una prestación a medida que garantiza a sus clientes una provisión de agua de calidad.
Ventajas del servicio de reparto de agua embotellada de Culligan
En primer lugar, esta empresa cuenta con una amplia flota de vehículos y un sistema de logística que planifica rutas de manera meticulosa. Gracias a esto, Culligan garantiza entregas puntuales y eficientes para múltiples necesidades. Además, al disponer de agua fría o caliente en cualquier momento, tanto las oficinas como los hogares pueden ofrecer mayor comodidad.
Por otro lado, para que este tipo de prestación sea más accesible, Culligan ofrece opciones de alquiler flexibles. Cabe destacar que existen distintos modelos de dispensadores, dado que algunos son ideales para espacios con una concurrencia de público elevada y otros se ajustan mejor a hogares o pequeñas empresas.
En cualquier caso, el servicio de atención al cliente de la marca proporciona asesoramiento cualificado para poder encontrar un dispensador de agua apto para cada necesidad. Asimismo, con las entregas de botellones programadas es una realidad asegurar el suministro.
Una alternativa sostenible y que permite ahorrar
Al contar con un dispensador de agua, se reduce el consumo de botellas de plástico de un solo uso. A su vez, es posible ahorrar tiempo porque no hay que ir hasta un supermercado y cargar con botellas, al igual que tampoco es necesario contar con un espacio de almacenamiento.
Cabe destacar que todas las botellas con las que trabaja Culligan son retornables. Una vez consumido el producto, el equipo de esta empresa las recoge. Después, se lavan e higienizan para poder ser reutilizadas. Este proceso permite que las botellas tengan una vida útil de hasta 50 usos y, una vez transcurrido este tiempo, se reciclan.
De esta forma, es factible disminuir el consumo de plásticos y avanzar en la adopción de costumbres orientadas a proteger el medioambiente. En la actualidad, esta empresa posee botellas de 13 y 19 litros. Por último, si es necesario, los clientes de la marca tienen a disposición estanterías de almacenaje que facilitan el almacenamiento.
En definitiva, a través de Culligan se puede acceder al alquiler de dispensadores y a un servicio de reparto de agua embotellada que resalta por su eficiencia. De este modo, son numerosos los espacios capaces de proporcionar una opción de hidratación de calidad.
