Muchas personas han tenido alguna vez la duda de si sería mejor reconstruir una casa o reformarla, y no están seguras de si se trata de una buena opción o en qué deberían pensar a la hora de decidir si tiran adelante o no la reforma.
EGM Grupo, especialistas en reformas integrales, plantea 4 consejos que permiten saber qué preguntas hay que hacerse para decidirse con mucha más facilidad.
¿Cuánto tiempo se va a permanecer en la casa?
Esta es una de las mejores preguntas, ya que si se tiene pensado quedarse a largo plazo, pero luego se tiene intención de vender la casa, se tiene que tener en cuenta que los elementos físicos de una casa tienen fecha de caducidad. Es decir, desde el momento que la casa se termina, empieza una cuenta atrás con la vida de techos, paredes, sistemas de aire acondicionado o calefacción, suelos, etc.
Si se llevan 20 años en una casa y se tiene planeado quedarse 10 años más y luego venderla, se decide que se va a hacer una reforma y que cuando pasen esos 10 años se estará vendiendo una casa de 10 años, moderna y adaptada a los tiempos. En cambio, si no se hace, la casa tendrá 30 años.
En el caso de no pensar en irse nunca, una reforma sería una buena opción para modernizar el hogar y darle un aire nuevo, revitalizar una casa y arreglar pequeños problemas que hayan ido saliendo en los años.
¿Cómo son las condiciones reales de un domicilio?
Sin lugar a dudas la casa merecerá una reforma o incluso derribo y obra nueva si se dan casos como que se quiera un espacio adicional (una habitación, un porche, una terraza cerrada, un saliente…) o los cimientos son malos o no están en buen estado o se cree que los techos son demasiado bajos para la persona.
¿Se puede realmente hacer la reforma u obra nueva que se quiere?
Hay que informarse de si se puede hacer la reforma deseada, ya que muchos pisos o casas deben limitarse a la estructura en los planos. En ese sentido, hay que asegurarse de que la reforma u obra sea posible consultando las leyes y permisos necesarios.
¿Se está preparado para una reforma?
La mayoría de reformas se pueden hacer mientras se convive en la casa, hecho que permite ahorrar dinero. Sin embargo, en ciertas ocasiones, existe la necesidad de abandonar el hogar para llevarse a cabo. ¿Se piensa que se está preparado o es posible abandonar el hogar durante el tiempo de la reforma u obra?
Desde EGM Grupo invitan a las personas a hacerse estas preguntas para asegurarse de que se hace lo más correcto y lo que realmente se quiere. Por eso, si se tiene alguna duda no hay que dudar en ponerse en contacto con los expertos, que estarán encantados de ayudar.