Debido a los altos costes, comer jamón de bellota es considerado un lujo entre los españoles y apasionados por los embutidos ibéricos. Sin embargo, su delicioso aroma y sabor, hacen que adquirir este producto valga la pena al precio que sea.
No obstante, entre los consumidores existen dudas sobre a qué se debe el alto precio de este tradicional embutido. País de Quercus, una empresa dedicada a la producción de jamones y productos de carnes y curados de la dehesa extremeña ofrece mayor información al respecto.
¿Por qué es tan caro el jamón de bellota?
Para explicar la razón de los altos costes del jamón de bellota, los profesionales de País de Quercus se basan en parámetros comparativos de producción entre del jamón ibérico de bellota con el jamón serrano, otro embutido emblemático de la gastronomía española.
En primer lugar, destacan que de promedio, una madre ibérica produce al año una media de 15 lechones, mientras que una madre Landrace, Large White (cerdo blanco utilizado para fabricar el jamón serrano), puede tener hasta 30 lechones al año. Debido a esto, los costes de producción de un lechón ibérico es mayor. Otro aspecto relevante es el rendimiento. El cerdo ibérico se caracteriza por acumular mucha grasa subcutánea en su cuerpo, teniendo un porcentaje de carne de solo un 50 %, a diferencia del cerdo blanco que tiene un rango de carne superior.
El estilo de vida es otro factor determinante en el coste. Cada cerdo ibérico necesita durante la «montanera» (periodo final de vida) unas dos hectáreas de dehesa arbolada para alimentarse, por lo que optar por el alquiler de un terreno para el engorde, ronda aproximadamente los 150 euros por animal, mientras que los cerdos blancos solo necesitan 2 metros cuadrados para su crianza en una nave techada.
Otros aspectos productivos que inciden en el coste
El tiempo de duración del engorde de los cerdos es un elemento que determina el precio de los jamones. El cerdo ibérico de bellota se alimenta de bellotas y hierbas durante sus últimos meses de vida, al criarse en libertad, tarda mayor tiempo en reponer peso, por lo que su coste de producción es superior. Por otra parte, el proceso de curación del jamón ibérico de bellota dura unos 3 años por su alto contenido de grasa, mientras que el jamón serrano, debido a su peso se cura solo en 8 -12 meses, por lo que la rotación de su comercialización es más rápida.
En cuanto al aspecto financiero, País de Quercus asegura que el retorno de inversión de un productor de jamón de bellota es de, al menos, 5 años, teniendo en cuenta el tiempo de crianza y curación del alimento, mientras que, para el fabricante de jamón serrano el tiempo se reduce a 2 años.
En conclusión, el precio que tiene el jamón de bellota en el mercado se debe a los altos costes y al tiempo que tarda la crianza, maduración y producción del producto. Sin embargo, su coste se compensa con su sabor auténtico, deleitante para el paladar.