Conducir un vehículo estando bajo la influencia del alcohol o en estado de ebriedad es un delito con graves consecuencias en Chile. Por lo general, puede acarrear la suspensión de licencia de conducir de forma temporal o definitiva, elevadas multas o incluso, prisión. Por ello, se considera uno de los países más severos sancionando estas conductas.
En este contexto, el apoyo legal suele ser determinante para conseguir una rebaja o suspensión de la condena. Por esta razón, los expertos recomiendan acudir a bufetes especializados en derecho penal como Defensa Manejos.
Causas comunes de suspensión de licencia de conducir
La suspensión de una licencia de conducir es una sanción que se impone a los automovilistas por diversas razones, las cuales varían según la jurisdicción de cada país. En Chile, ocurre por infringir la Ley de Tránsito o alguna normativa de seguridad vial. Otra de las razones más comunes es el exceso de velocidad y no obedecer las señales de tránsito.
Sin embargo, las faltas más graves suelen adjudicarse a los conductores que conducen bajo los efectos del alcohol o en estado de ebriedad avanzada. Al respecto, los jueces y los directores de seguridad y transporte público muestran menos benevolencia ante pruebas de alcoholemia positivas. Por ello, la suspensión es de dos años para la primera infracción, cinco años para el segundo incumplimiento y es permanente en el tercer evento. Las personas también corren el riesgo de enfrentar multas o prisión mínima. Según la Ley 20.580, una persona alcoholizada puede enfrentar una pena de entre 61 a 540 días de prisión.
Defensa legal para la suspensión de la licencia de conducir
Durante el procedimiento para revocar la licencia de conducir, el acusado debe recibir una notificación previa que explique las causales. Asimismo, tiene el derecho de apelar para defenderse y evitar las sanciones. En este sentido, en Chile, existen diversos bufetes legales con experiencia en la defensa de incidentes de conducción, como Defensa Manejos.
Se trata de un despacho de abogados especializado en delitos de conducción bajo los efectos del alcohol, dirigido por el abogado penalista Jorge Ignacio Robles Zañartu. Durante el procedimiento, realiza un diagnóstico minucioso del caso para establecer la situación y proponer las estrategias más pertinentes para la defensa del cliente.
Además, se encarga del proceso de representación en el tribunal y asume las negociaciones. De esta manera, suele conseguir como resultado la absolución o exoneración de los cargos. Por otra parte, en casos graves o de reincidencia, puede explorar opciones alternativas a la suspensión como asistir a cursos de educación vial o realizar trabajo comunitario.
Los especialistas afirman que es importante contar con la defensa de un abogado penalista durante incidentes de conducción o infracciones viales. El objetivo es garantizar la protección de los derechos del acusado u obtener una resolución justa y satisfactoria.
