La quilpueína Camila Parra Sanhueza, masoterapeuta y fisioterapeuta es la creadora del proyecto de Voluntariado, quien presentó su proyecto al Hospital de Quilpué y fue canalizado a través de la Unidad de Programas Humanizadores de la Atención, para realizarlo con pacientes del Servicio de Ginecología y Obstetricia, además de replicarlo a pacientes hospitalizados por Salud Mental y de a poco a algunos funcionarios y funcionarias de los equipos clínicos.
“Realizo masajes de relajación con técnicas descontracturantes junto con algunas terapias complementarias, como aromaterapia y musicoterapia, como parte del voluntariado que hago en el área de salud mental y maternidad del Hospital de Quilpué” expresó.
La idea de hacer el voluntariado comienza desde hace tiempo, tras sufrir la pérdida de su abuelo materno por un cáncer terminal, cuando era adolescente. “Cuando comencé a estudiar pensaba que podría haberlo ayudado a relajarse con masajes y por eso nació la idea de poder ayudar a otras personas que padecieran de alguna enfermedad. Otro gran motivo fue el embarazo de mi hermana, me pedía constantemente masajes para aliviar los dolores propios de ese estado” comentó Camila.
Nuestra voluntaria manifiesta que con sus masajes “espero que las personas se sientan acompañadas, alegres y relajadas. Además, decidí ampliar mi proyecto y realizarles masajes al personal que está ahí apoyando y cuidando a los pacientes, que sepan que son importantes, que sin ellas y ellos nada sería posible y que merecen al igual que los pacientes, respeto, amor, y autocuidado”.
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