miércoles, agosto 27, 2025

Manual de mantenimiento de instrumental quirúrgico veterinario Belovet

Fecha:

La calidad del resultado quirúrgico comienza mucho antes de la incisión: nace en la limpieza, inspección y esterilización del instrumental quirúrgico. Un protocolo sólido reduce infecciones, protege tejidos, conserva el filo y prolonga la vida útil de cada pieza. Cuando el equipo trabaja con estándares y disciplina, la curva de complicaciones baja y la confianza del quirófano sube. En este manual práctico, se mencionan criterios claros, pasos accionables y puntos de control que fortalecen la seguridad del paciente y la eficiencia del equipo.

Principios rectores del cuidado

La meta es reproducir siempre el mismo estándar: descontaminar, limpiar, enjuagar, secar, inspeccionar, lubricar, empaquetar, esterilizar y almacenar. Cada eslabón prepara el siguiente. Si uno falla, todo el proceso se debilita. Por eso, el protocolo define responsables, tiempos, insumos y registros; el equipo entrena, audita y mejora.

Limpieza inmediata postoperatoria

El tiempo juega a favor cuando se actúa de inmediato. Es importante evitar que sangre y proteínas se fijen en bisagras, cremalleras y ranuras, y facilitar una desinfección posterior efectiva. Abrir, desmontar y clasificar por familias es lo más recomendable para acelerar el flujo de trabajo y minimizar errores.

Enjuague y prelavado

Comenzar con agua corriente no muy dura para retirar carga orgánica gruesa. Evitar el remojo prolongado sin control, que favorece corrosión y manchas. Si se necesita remojar, el agua destilada o desmineralizada con detergente enzimático es la mejor opción, según dosis del fabricante.

Lista rápida de prelavado:

-Usar detergente enzimático de baja espuma y compatible con instrumental.

-Mantener temperatura por debajo de 50 °C para no desnaturalizar enzimas ni coagular proteínas.

-Emplear cepillos de nailon suaves; nunca abrasivos metálicos.

-Enjuagar con agua destilada o desmineralizada para retirar residuos y sales.

-Secar completamente con paño suave o aire comprimido.

Limpieza manual paso a paso

1-Sumergir piezas abiertas/desmontadas en solución enzimática al tiempo indicado por el fabricante.

2-Cepillar articulaciones, dientes y ranuras con movimientos controlados hasta eliminar restos.

3-Enjuagar a fondo con agua destilada o desmineralizada.

4-Secar cada superficie, priorizando zonas ocultas y bisagras.

5-Tras secar, separar piezas que requieren lubricación.

Ultrasonido: cavitación que sí suma

Las cubetas ultrasónicas resuelven geometrías complejas y fenestraciones. Ajustar solución, nivel, tiempo (3–5 min típicos) y temperatura (≈40 °C). Evitar exceder los 55 °C y no apoyar instrumentos en el fondo: usar canastilla para protegerlos y optimizar la cavitación.

Lubricación e inspección funcional

Lubricar instrumental articulado con productos hidrosolubles y de alta penetración. La lubricación reduce fricción, protege superficies y conserva precisión.

Chequeos no negociables

Tijeras: corte continuo desde bisagra a punta; sin juego en el tornillo; cortar gasas/guante según tipo.

Portaagujas: sujeción firme en segundo diente; no deslizar hilo 3/0 en mitad distal; mandíbulas íntegras.

-Pinzas hemostáticas: puntas alineadas; cremallera abre/cierra suave; estrías que acoplan perfecto a contraluz.

-Atraumáticas (p. ej., DeBakey): al ocluir papel fino no perforar ni dejar marca uniforme.

Empaquetado: contenedores y bolsas

El empaquetado protege la esterilidad hasta el uso. Seleccionar contenedores rígidos compatibles con los ciclos y filtros en buen estado, o bolsas de grado médico termoselladas en la longitud adecuada para evitar tensión.

Claves de embolsado:

-Dimensionar la bolsa a ¾ de su volumen con 2–3 cm libres por lado.

-Proteger puntas con tubos de silicona aptos para autoclave.

-Si el almacenaje es prolongado o hay cargas múltiples, usar doble bolsa.

Esterilización en autoclave

Definir el ciclo según carga y uso posterior:

Clase N (desplazamiento por gravedad): material sólido sin envolver para uso inmediato.

Clase B (vacío): penetra textil, cavidades y motores; ofrece secado superior.

Clase S: opción intermedia para sólidos embolsados y cavidades poco profundas.

Carga correcta, resultados consistentes:

1-Verificar agua destilada, papel de registro e integridad de envoltorios.

2-Colocar metal abajo y textil arriba; así se evita superar el 75% de la capacidad.

3-Ordenar bolsas verticales de papel con plástico alterno para favorecer el flujo de vapor.

4-No apoyar paquetes en paredes, puertas o desagüe.

5-Seleccionar el ciclo conforme al contenido y monitorear la pantalla.

Descarga sin comprometer la esterilidad

1-Esperar presión cero y evitar abrir de inmediato para no generar condensación.

2-Revisar indicadores externos e internos.

3-Comprobar que paquetes estén secos e íntegros.

4-Evitar superficies frías durante el enfriamiento.

Indicadores y control de proceso

Integrar indicadores químicos externos (cinta) e internos (tiras de paquete) en cada ciclo para detectar fallos de tiempo, temperatura o penetración. Registrar lote, fecha, ciclo y responsable. Estos datos alimentan trazabilidad y auditoría.

Almacenamiento con criterio

Guardar en vitrinas o cajones cerrados, lejos de calor/humedad, a >25 cm del piso y >45 cm del techo. Separar estéril de no estéril, rotar por caducidad, no comprimir bolsas y reesterilizar cualquier paquete con envoltorio dañado o húmedo.

Esterilización química: cuándo y cómo

Para material termolábil, recurrir a la desinfección de alto nivel u opciones químicas especializadas. Manejar cada solución con EPP y en áreas ventiladas; tras el proceso, enjuagar con agua estéril para evitar irritación tisular.

Opciones frecuentes:

-Glutaraldehído 2 % con activación y vida útil limitada.

-Hipoclorito a 0,5 % preparado con cálculo de dilución exacto.

-Alquilaminas al 2 % con estabilidad controlada y acción veloz.

-Vapor de formol en sistemas específicos a baja temperatura.

Mantenimiento de la autoclave

Limpiar a diario la junta de puerta; verificar nivel de agua destilada; retirar cal y residuos semanalmente; lubricar bisagras/perno con aceite de vaselina; solicitar revisión técnica anual. Un equipo afinado sostiene la esterilidad y previene fallos de ciclo.

Errores comunes y cómo evitarlos

-Remojar sin control y a temperaturas altas.

-Usar jabones comunes o cepillos metálicos.

-Omitir el secado y guardar con humedad residual.

-Sobrecargar la cámara o apoyar paquetes en paredes.

-Saltar indicadores internos y registros de ciclo.

Seguridad, eficiencia y Belovet

Cuando el instrumental responde, el quirófano respira. Belovet comprende esa exigencia diaria. El equipo asesora en la selección de instrumental, compatibilidad con los procesos de reprocesamiento y buenas prácticas para alargar la vida útil de las piezas.

Si el objetivo es estandarizar el protocolo o renovar surtidos clave, se puede consultar el catálogo de Belovet y la guía personalizada para el flujo de trabajo. Los pacientes ganarán seguridad y confianza en el equipo.

Comparte

Actualidad

Te puede interesar
Relacionado

Terapia con IA; ¿Solución o riesgo para la salud mental?

En el panorama actual de la salud mental, la...

España, Perú y la Escuela Técnica de Joyería del Atlántico se unen con las BECAS TALENTO ATLANTICO

La Escuela Técnica de Joyería del Atlántico, ubicada en...

Fleeverse, el primer estudio creativo del mundo especializado en diseñar experiencias de viaje en entornos de gaming

Fleeverse: flee (huir, escapar) y verse (de universo).Ha nacido...