La naturaleza también puede vivirse desde una pared. Esa es la premisa con la que Maite Ballesteros, artista y paisajista afincada en Murcia, ha desarrollado Entremusgo, un proyecto de jardines verticales sin mantenimiento que ha conquistado espacios tan dispares como restaurantes, oficinas, clínicas o viviendas particulares. Hoy, su propuesta ha sido reconocida como una de las diez seleccionadas en la última edición del programa regional Emprendedoras 10, organizado por el CEEIC en colaboración con el Instituto de Fomento de la Región de Murcia.
Desde su estudio en Murcia, Maite ha logrado convertir un concepto tan evocador como los jardines verticales sin mantenimiento en una forma de arte con impacto emocional, estético y sostenible. Entremusgo no es una tienda al uso: es una experiencia sensorial, donde cada diseño se adapta al espacio, la personalidad y la necesidad de conexión con la naturaleza de cada cliente.
“Muchas personas buscan reconectar con lo natural, pero no tienen tiempo ni recursos para mantenerlo. Yo les ayudo a traer la belleza etérea del bosque a su hogar o negocio, sin complicaciones ni mantenimiento”, afirma Maite.
La selección de Entremusgo en Emprendedoras 10 representa un impulso y también un símbolo: el de un nuevo modelo de emprendimiento que aúna sostenibilidad, arte, cercanía y diseño emocional. El programa ha apoyado a otras nueve mujeres con propuestas transformadoras que están marcando la diferencia en el ecosistema emprendedor regional.
En un contexto donde la decoración se ha vuelto homogénea y carente de alma, propuestas como Entremusgo despiertan el interés de quienes buscan algo más: un vínculo real con su entorno, una atmósfera que inspire y reconecte con lo esencial. “Lo mío no es decoración vegetal, es arte en estado puro”, afirma sin pretensión, pero con convicción. Y esa honestidad se refleja en los comentarios que recibe: atención exquisita, resultados espectaculares y una implicación personal que va más allá del encargo.
Además de su calidad estética, los jardines verticales sin mantenimiento de Entremusgo ofrecen una solución funcional para lugares donde la luz escasea o el tiempo apremia. Son sostenibles, hipoalergénicos, no requieren riego y se adaptan a cualquier entorno: desde el hall de una asesoría hasta el baño de un apartamento urbano.
Este reconocimiento se suma a otros hitos que consolidan la presencia de Entremusgo como referente en el arte vegetal en la Región de Murcia. Su propuesta está ayudando a redefinir los códigos de la decoración, apostando por materiales nobles, acompañamiento cercano y una estética basada en la naturaleza real.
Para Maite, sin embargo, lo importante sigue siendo lo mismo: mantener el contacto cercano con cada cliente, seguir creciendo paso a paso y no perder nunca su vocación creativa. “Soy pequeña, sí, pero eso me permite cuidar cada detalle, hablar con cada persona, y hacer que todo lo que creo tenga alma”, concluye.
Más información en www.entremusgo.com.
